Las largas jornadas que nuestros pies soportan diariamente pueden causar, además de cansancio, resequedad, callosidades o incluso infecciones como el pie de atleta. Por eso, es fundamental mantener los pies y los dedos en buen estado.
¿Sabías que existe una práctica milenaria que puede ayudarte a cuidar tus pies? Se trata del yoga. En este artículo, descubrirás algunos ejercicios sencillos que puedes hacer para mejorar la flexibilidad, fortalecer los músculos de tus pies y tobillos, y sentirte más firme al caminar. ¡Te sorprenderá lo fácil que es integrarlos en tu rutina diaria!
Sigue leyendo y descubre cómo cuidar esa parte del cuerpo que te lleva a donde quieras ir.